ENTREVISTA A JAVIER MARGÜELLO 'PITIRRI'

Javier Margüello ‘Pitirri’ es toda una leyenda viva del corte puro y piensa que este año el nivel de los festejos taurinos ha sido muy alto gracias a la casta de las reses y a la participación de cortadores “de sabia nueva”, que han amenizado unas fiestas que han culminado con un concurso de cortes que “ha gustado a la inmensa mayoría de la gente”.

¿Qué balance hace de las Fiestas de Nuestra Señora y San Roque un afamado y laureado cortador como usted?
El balance es positivo, quitando el lunar de la muerte de un hombre durante la capea del día 15. Taurinamente hablando, creo que los toros han dado mucho juego y en cuanto al ambiente festivo, pienso que todos nos hemos dado cuenta de que ha habido mucha gente y mucha participación.
Dice que los toros han dado juego. ¿Qué le han parecido los utreros del encierro del 15?
El encierro del día 15 fue un acierto y hay que recordar que los toros que han dado más cornadas no han sido los del día 15, sino otros. Incluso, el que mató al hombre de Dueñas el día 15 era un eral, de los más pequeños.
¿Así que el tamaño sí que importa en esto de los toros?
El toro grande con casta es mucho mejor que el pequeño sin casta. Otra cosa es que se hubiesen traído toros de 3 o 4 años sin casta, pero como no ha sido así está claro que las capeas de este año han sido mucho más vistosas. Los toros que se sacaron para cortar por dentro eran auténticas joyas.
Sí que se han visto más cortes durante las capeas de estas fiestas que en las de años anteriores…
Claro. La prueba está en que el día en el que se soltaron los utreros por dentro, los cortadores se divirtieron mucho e hicieron divertirse también al público.Yo sólo me he metido con los utreros, cuando se han soltado los erales yo no he participado.
Vamos, que ande o ande, el burro grande…
No tiene nada que ver con las dimensiones o el peso. Lo importante en un toro es la casta. Yo tenía claro que este año no me iba a meter, porque ya tengo 39 años y un crío, pero me comentaron que iban a venir estos animales con trapío y no he podido resistir la tentación.
Es que esto de los cortes es como un vicio…
La suerte que he tenido es que nunca me ha empitonado un toro. Me han partido muchas camisetas, me han dado palizas, pero he tenido la fortuna de que no me han picado nunca y eso, influye mucho.
Dicen los entendidos que la suerte más complicada para un cortador es el corte puro. ¿Los saltos y los quiebros son más fáciles de realizar?
La persona que se dedica a hacer saltos tiene que tener una forma física impresionante. Yo no lo haría ni con toro, ni sin toro. Quiebros he pegado alguno, pero el corte puro es lo que he practicado y sé, a ciencia cierta, que es muy complicado y que hay que tener mucha técnica.
¿Cómo nace un cortador?
Yo empecé muy tarde con esto de los toros. Comencé con 18 ó 19 años. Me acuerdo que a mi abuelo, que ya murió, le gustaban mucho los toros y yo le veía desde el balcón. A lo mejor la afición me viene por esa parte. Luego, mi hermano se empezó a meter y un día me tiré a Pesquera, que antes tenía vacas, y ahí hice mis primeras incursiones en el mundo del toro. Pero jamás en la vida pensé que iba a llegar a ganar en Medina, Valladolid o en Íscar.
Usted ha sido un gran cortador y tiene un montón de trofeos. ¿Se puede vivir de esto?
No. Yo tuve cuatro años buenos y es muy raro que un cortador tenga cuatro años buenos. Generalmente se pueden tener uno o dos años buenos porque, aguantar la presión física y mental, es muy complicado. Un cortador no tiene la presión de un deportista porque, cada vez que sale a la plaza, sabe que se está jugando la vida. Puedes tener suerte y ganar 5 ó 6 millones de pesetas, pero esto se acaba ¿y luego, qué?
Se han visto muchos cortadores durante las capeas de este año. ¿Quién ha sido el que más espectáculo ha dado?
Ander García ha dado mucho juego, es un chico joven que tiene mucha proyección, pero ha habido muchos como Fran ‘Leguiche’, un chico de Medina del Campo, que tiene mucha plaza aquí y que me gustaría que estuviera el año que viene en el concurso de cortes. Se ha ganado a pulso estar en el concurso de San Roque 2010 porque ha dado un espectáculo tremendo y se ha ganado el cariño del público sin ser de Peñafiel, y eso hay que agradecerlo.
Peñafiel siempre ha sido tierra de grandes cortadores. ¿El relevo generacional está garantizado?
Peñafiel ha tenido, tiene y tendrá grandes cortadores. Durante algún año hemos estado hablando Javier Rancho y yo de que nos iba a costar jubilarnos porque parecía que tardaban en salir caras nuevas. Pero está claro que los jóvenes nos van echando y es lo mejor que puede pasar para que esta fiesta siga siendo tan importante como es actualmente.
Parece que el futuro del corte en Peñafiel pasa por Ander García, que ha dado un recital este año. ¿Pero no tiene una estatura un poco baja para dedicarse a esto?
Le falta un pelín de altura para que el corte fuera más vistoso. Además cuando los toros sean un poco más grandes lo va a tener un poco más complicado, pero Jesús Sanz ‘El Parri’, que es para mí el mejor cortador de la historia, mide un poco más que él y es toda una institución. El tamaño tampoco importa tanto en esto de los cortes.
Este año se ha hablado mucho de seguridad después de los lamentables hechos sucedidos en Peñafiel, Tudela, Leganés o Navarra. ¿Cómo se pueden regular los festejos populares con toros para que no sucedan estas cosas?

Si se hace un balance de las cornadas que ha habido este año en Peñafiel, la media estará en unos 50 años. Yo tengo 39 y no sé si me meteré para el próximo año. Pero lo que tengo claro es que cuando tenga 50, no voy a dar un corte, ni a citar a un toro dentro de un portal.
En Peñafiel es tradicional la suelta de novillos por dentro y por fuera del ruedo. ¿Hay más peligro por fuera que por dentro del ruedo?
Yo en los portales no piso y si voy, me meto de los primeros. Todos quieren ver el toro hasta que llega, pero luego hay que entrar. El señor que tiene una barriga que no cabe por entre los palos empuja a uno, otro se tropieza, el de más allá quiere entrar por un palo en el que se ha quedado uno mirando. Vamos, que se está más tranquilo dentro.
Miguel Alejo, delegado del Gobierno en Castilla y León, ha afirmado recientemente que es partidario de reforzar los mecanismos de seguridad durante los festejos populares con toros. ¿Qué opina al respecto?
Los reglamentos siempre se pueden matizar, flexibilizar o endurecer, pero es que parece que nos hemos olvidado de que lo que se sueltan son toros bravos. Si los toros no hicieran nada, todos seríamos cortadores, saltadores y toreros. El riesgo es la grandeza de la fiesta, y sin ese riesgo no habría festejos.
El I Concurso de Cortes de Peñafiel ha sido un éxito y parece ser que este espectáculo se va a seguir realizando. ¿Le da pena no haber nacido un poco más tarde para ser profeta en su tierra?
A todo el mundo le gusta competir en su tierra, pero creo que el alma de las fiestas de Peñafiel son las capeas y me ha gustado mucho participar durante todos estos años. A mí el concurso me encantó y creo que a la inmensa mayoría de la gente, también. Pero me hubiese gustado que hubiese algún participante más del pueblo y algún otro, como ‘Leguiche’, que vienen cada año a participar en las capeas.

Entrevista y fotos cedidas por el Ayuntamiento de Peñafiel.